El Rastro, de origen medieval, es uno de los mercadillos más emblemáticos de España y uno de los mercados más antiguos de Madrid. Ubicado en el barrio de La Latina, en el entorno de la Ribera de Curtidores y con la plaza de Cascorro como centro neurálgico, acoge la oferta de más de 1.000 vendedores que, domingos y festivos, ofrecen distintos tipos de artículos que van desde artesanía, ropa y complementos, hasta artículos de cocina, discos y revistas de segunda mano, entre otros.