La cultura culinaria de Madrid es rica en variedades pasteleras, bien asociadas a determinadas fechas y celebraciones, bien comercializadas durante todo el año. Con recetas autóctonas, a menudo de influencia árabe, la repostería madrileña incluye también especialidades de otras regiones españolas que evidencian el papel de Madrid como ciudad de acogida de ciudadanos procedentes de distintos lugares del país.